Las implicancias de incluir lo digital en las luchas contra la violencia hacia las mujeres

“Para nosotras es una muy buena noticia. Es entender que esto incluye los entornos digitales a la Ley 26485 que es la de la violencia para erradicar y sancionar la violencia contra la mujer. Celebramos esto porque incorpora el entorno digital algo que ya estaba planteado y que toma en dimensión que lo que sucede en internet es real”, reflexionó Milagros Schroeder, coordinadora de educación de la ONG Faro Digital, una de las impulsoras de la reforma de La Ley Olimpia que se aprobó hace días en el Congreso nacional. 

La nueva legislación que comenzará a regir en nuestro país permitirá castigar a quienes atenten contra la intimidad sexual de las personas a través de los medios digitales y sanciona la difusión sin consentimiento de cualquier contenido. 

Capacitación en género en la Universidad Popular Salsipuedes

“Hay distintas formas de violencia digital. El entorno digital es un espacio público como lo es la calle donde las personas convivimos en el mismo modo que convivimos en otros entornos. Vamos a trasladar nuestras problemáticas de lo bueno y lo malo porque somos las mismas personas de carne y hueso", aseveró una de las encargadas de la organización no gubernamental en dialogo con el programa radial Despertar Serrano. 

En relación al consentimiento, divulgación sin consentimiento y nuevas formas de violencia en las redes sociales y el mundo digital en general, Schroeder destacó: "Es importante entender como es el circuito de la difusión. Todas y todos entramos en esa. Incluso muchas veces lo difundimos en un acto de repudio pero estamos colaboramos con la difusión. Es importante entender el rol individual afecta lo colectivo y cómo tenemos que hacernos cargo de las imágenes intimas sin consentimiento como una problemática social donde estamos agrediendo a una persona, en donde insistimos no hubo consentimiento y se está violando su intimidad."

Consentimiento SI Y NO. "Una cosa es lo que suceden el ámbito privado y otra cosa lo que sucede en el ámbito público . El consentimiento es especifico. Yo digo que sí a sacarme una foto pero no a que se divulga. Yo dije que sí a una cosa, pero no a toda el resto. Ahí es donde se pone la mirada hacia la mujer y se re victimiza", finalizó Milagros coordinadora de la ong dedicada a la formación, acompañamiento e investigación sobre los usos reflexivos y críticos de las tecnologías digitales. 

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