En últimas horas del viernes por la noche, el intendente de Mendiolaza, Daniel Salibi, sorprendió a propios y ajenos al firmar un decreto que modifica la fecha de las elecciones municipales. Recordemos que, por decisión del propio mandatario, la ciudad por primera vez celebraría sus comicios junto a las elecciones provinciales del 25 de junio.

Ahora, la nueva fecha planteada por Salibi sería 23 de julio, aunque ante las denuncias presentadas por la oposición, el asunto está en manos de la Justicia electoral. Mientras tanto, los precandidatos de la ciudad no ocultaron su malestar.

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“Está cambiando un decreto que él mismo firmó, borra con el codo lo que escribió con la mano porque no pudo influir en la decisión de la mesa de Juntos por el Cambio”, señaló la concejal Adela Arning, precandidata por el PRO.

Siguiendo el relato de Arning, la mesa de la alianza que integran la UCR, el PRO y el Frente Cívico había establecido que la selección de candidatos sería “de la manera más transparente y avalada por la sociedad, a través de una encuesta”. 

“En esa instancia de sentarse a dialogar con los resultados de las encuestas, el intendente quiso imponer la candidatura de Martín Marcolongo, ante lo cual exigimos respeto a las reglas que se habían planteado. Al no poder torcer la decisión, optó por cambiar la fecha de las elecciones”, explayó la representante del PRO.

“Eso me enoja, me pone mal”, reconoció Arning. “¿Cómo puede ser que sigan manipulando a su antojo cuestiones que deberían depender de lo que se establece en una mesa provincial?”, cuestionó.

Ante esta situación, la concejal reconoció que las posibilidades de seguir trabajando juntos como alianza son casi nulas y afirmó: “Seguiremos trabajando para que nuestra propuesta sea la mejor. Todo esto nos hace más fuertes (…) Si las elecciones son el 25 de junio, estamos preparados. Y si son el 23 de julio, también”.

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