El Concejo Deliberante aprobó la medida. El propósito es reforzar la seguridad vial y reducir la contaminación sonora en la ciudad.
El Concejo Deliberante de Río Ceballos aprobó una nueva medida que prohíbe la carga de combustible a motocicletas sin patente visible o con escapes antirreglamentarios. Con el objetivo de reforzar la seguridad vial y reducir la contaminación sonora en la localidad, la iniciativa fue impulsada de manera unánime y está enmarcada en la modificación de la Ordenanza 1993/12, como parte de un conjunto de acciones destinadas a mejorar el ordenamiento del tránsito y la convivencia ciudadana.
Desde el municipio remarcaron que con dicha disposición se pretende desalentar el uso de motos sin la documentación correspondiente y aquellas que generan ruidos excesivos debido a la alteración de sus escapes.
Más control
La ordenanza establece que las estaciones de servicio de la ciudad deberán exigir que las motocicletas tengan su patente en condiciones y que los escapes cumplan con la normativa vigente antes de realizar la carga de combustible. En caso de incumplimiento, podrán ser sancionadas.
El control del cumplimiento de esta medida estará a cargo del personal de Tránsito y de las fuerzas de seguridad locales, que trabajarán en conjunto para identificar a los infractores y aplicar las sanciones pertinentes. También se prevén operativos periódicos para detectar y retirar de circulación las motocicletas en infracción.
En este marco, cabe recordar que el año pasado el Concejo Deliberante aprobó una modificación del régimen de ruidos molestos.
El concejal Giuseppe Bosco, presidente del Bloque de Juntos por el Cambio, dialogó con radio Nexo y remarcó que la medida entraría en vigencia próximamente. “Es una herramienta más que va a ayudar tanto al Ejecutivo como a los vecinos a trabajar en esto que era una problemática grande. Sé que hay cuestiones en las que trabajar, pero estamos dando pasos firmes con acciones que nos ayudan a mitigar el impacto de los ruidos molestos”, aseguró.
AUDIO DE ENTREVISTA A GIUSEPPE BOSCO
