Marcha por la inseguridad en barrio Las Polinesias de Villa Allende

El próximo miércoles 8 de mayo, a las 10 de la mañana, se realizará una manifestación en la puerta de la Municipalidad de Villa Allende en la que vecinos del barrio Las Polinesias reclamarán más seguridad, mejoras en las frecuencias de colectivos que entren al barrio y en las luminarias.

Como vocera de vecinas y vecinos de esa popular barriada habló Dalinda Ramírez en radio Nexo y explicó: ''Los que sentimos y vivimos es la falta de seguridad. Estamos aislados de Villa Allende, no nos tienen en cuenta en seguridad, en tema alumbrado, en colectivos que a veces ingresan y a veces no''.

Además, añadió: ''Lo de la seguridad es grave. Nos roban hasta los medidores de agua. La policía hace lo que puede. Lo que nosotros necesitamos es la fiscalía de Villa Allende que no hace nada porque entran por un lado y salen por otro''.

La vecina, preocupada como la mayoría de sus conciudadanos, explicó una realidad que viven los habitantes de esa zona poblada de Villa Allende: ''Acá nos ven como un barrio, como zona roja o peligrosa. Y no es así. Acá tenemos muchas familias que trabajamos, tenemos niños que van al colegio, en el secundario, hijos que están terminando el secundario porque hay familias que se esfuerzan para que sus hijos no sean como los ladrones''.

Y pidió púbicamente la presencia de autoridades: ''Como familia y como padres exigimos seguridad, que nuestro intendente recorra barrio Las Polinesias, vea las zonas donde ingresan los colectivos y no tenemos luz. Es una facilidad para los ladrones de arrebatarte carteras, mochilas, el celular, las zapatillas. Y si van más lejos hasta te pueden dejar desnudos por las cosas que llevás''.

Sobre el tema del ingreso del colectivo al barrio en horarios de la tarde y noche, ella dijo: ''Lo apedrean y no quiere ingresar al barrio. En ese horario, muchos chicos de sexto año tienen que caminar por la subida y en ese momento es donde les roban. Exigimos que nos manden un móvil para que acompañe el colectivo. Los deja en el frigorífico, a partir de las siete y media y ya no quiere ingresar al barrio''.

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