En San Francisco, su ciudad natal y luego de asistir a la ceremonia de asunción de Javier Milei como Presidente de la Nación, Martín Llaryora juró como nuevo gobernador de la provincia de Córdoba. Recibió el bastón de mando de manos de Juan Schiaretti en una ceremonia cargada de simbolismo y de emociones.

En sus primeras palabras como principal mandatario cordobés, Llaryora apeló a la emoción en un acto que tuvo dos partes: una, por la mañana en la Legislatura y la otra, por la tarde, como se indicó anteriormente, en San Francisco. En el discurso inaugural, el gobernador dijo:

"Quiero agradecer a los vecinos de toda la provincia que nos entregaron su confianza una vez más para gobernar nuestra querida Córdoba que tiene la hermosa característica de ser diversa, compleja, protagonista, pujante y rebelde. Les quiero decir que voy a dejar todo, como siempre, para estar a la altura de estos tiempos y las necesidades de mi pueblo, sabiendo que estamos en una de las peores crisis económica y social de la historia argentina”, fueron sus primeras palabras.

Luego, entre las medidas anunciadas, enumeró:

• “Vamos a reducir en un 25 por ciento el haber del gobernador y vice; 15 por ciento los ministros y 10 por ciento a los funcionarios políticos"
• “Con la humildad y la voluntad de sumar y seguir invitando a representantes de distintas expresiones políticas y sociales porque estamos convencidos que con las ideas de todos tomaremos las mejores las decisiones para enfrentar los nuevos desafíos que nos presenta la sociedad”
• "Duplicación de la cantidad de fiscalías antinarcótico; y narcotest para los funcionarios provinciales. Modificación de la ley 9.235. Adelantó la creación de la Policía Municipal y la incorporación de las empresas privadas de seguridad. Refuncionalización de la Policía de Córdoba y el Servicio Penitenciario"
• "Pondré en práctica un programa de empleo que, junto al sector privado, incorpore al trabajo a los hombres y mujeres de entre 25/45 años, para que entonces recuperen la experiencia del trabajo y obtengan mejores condiciones de vida".
• “Me propongo ser el gobernador que lleve la conectividad a cada rincón de nuestra Córdoba”.
• “Nos toca construir la Córdoba de los nuevos tiempos, asentada sobre la solidez de los construido hasta acá, pero decidida firmemente a enfrentar los nuevos desafíos con decisión, con innovación, con diálogo, con apertura y con participación plena de todos los sectores de la sociedad”.

La palabra de Juan Schiaretti

El gobernador saliente, con mucha emoción, hizo el traspaso de mando a Martín Llaryora. En su discurso manifestó: 

"Quiero felicitar a Martín Llaryora, quien va a ser un gran gobernador de Córdoba y va a llevar a nuestra querida provincia por la senda del progreso”. Y añadió: "Es un orgullo pasar la posta a una nueva generación, que va a superar los desafíos que se presenten y a trabajar para mejorar la calidad de vida de todos los cordobeses".