Luego de que vecinos alertaran la presencia de máquinas en la Reserva Hídrica San Fernando, y de que organizaciones ambientalistas se reunieran con el Intendente Eduardo Romero para desmentir el desmonte y la urbanización; se difundió un mapa del Instituto de Planificación Metropolitana que muestra el avance del desmonte. Donde indican una zona metropolitana sin bosques, hoy son 500 hectáreas de monte en Sierras Chicas.

“Creemos en la honestidad cuando nos dicen que no nos están  desmontando, pero hay cuestiones que se están deslumbrando y parece que la situación es más compleja” aseguró el Ing. Sergio Chiavasa.

El Instituto de Planificación Metropolitana (Iplam) difundió un proyecto de ordenamiento territorial, donde se identifica que se pretende extender la mancha urbana sobre superficies con bosque nativo. Es un proyecto elaborado con el objetivo de cuidar las cuencas hídricas y de compactar el crecimiento urbano. Pero desde la Coordinadora Ambiental y de Derechos Humanos de las Sierras Chicas aseguran que varias zonas marcadas como urbanizables hoy están cubiertas de bosques.
“Sólo en Villa Allende, de manera arbitraria decidieron el cambio de uso del suelo para unas 500 hectáreas de bosque nativo; en La Calera más de 300; en Unquillo otras 300 más, y 200 en Salsipuedes. Están en categoría ‘urbanización condicionada’”, explican desde la coordinadora.

En este marco, un grupo de ambientalistas se acercaron a la zona para dialogar con los dueños de los campos en cuestión. “Luego de increparnos, nos expresaron que allí se van a hacer dos loteos” comentó Joaquín Deon de la Coordinadora Ambiental. "De esta manera se pretende avanzar con la urbanización hacia la zona de San Fernando y Pan de Azúcar”, concluyó.

Esta confirmado que se ha hecho un cambio de solicitud de cambio de uso de suelo en la Provincia. En este sentido “nosotros queremos que se haga una instancia de participación ciudadana, que podamos decidir de que manera se usa el suelo, porque más allá que sea una propiedad privada, se tienen que abrir espacios de diálogo porque es una zona de gran tamaño, que duplica Villa Allende”, expresó Joaquin.
“Está en juego bienes comunes, como el agua, el bosque, la tierra, lo que suceda aquí arriba nos repercute a nosotros”, explicó Deon.

Por otro lado según la actual Ley de Bosque, esa área es zona roja y amarilla, en tanto no se puede bajar a una categoría de uso de suelo que permita el desmonte. Joaquin explicó que este cambio se debe a que el Iplam y la Secretaria de Ambiente de la Provincia están accediendo al cambio arbitrario para realizar las lagunas de retención. "Por lo que están aprovechando cambiar el uso del suelo para autorizar además urbanizaciones, donde el riesgo de inundarnos será cada vez peor", lamentó Joaquin Deon

En cuanto a cuáles son los caminos a seguir,  Jaoquin  alentó  "que quienes decidan se animen a decir que no; que prioricen la vida y se animen a decir no a la urbanización".

AUDIO: Columna Ambiental "En el centro de las Cosas"