Silvina trabaja de cocinera en los CADINAS de Villa Allende; el jueves mientras se preparaba en la cocina, su hijo de tan sólo 17 años ganaba un partido en un campeonato internacional de las inferiores del Club Belgrano.
Por primera vez en las tres presentaciones que tuvo en la Viareggio Cup, Belgrano se metió en los octavos de final. Mientras tanto "toda la felicidad la descargo en la comida" aseguró la mamá de Cocay Salas, uno de los jugadores.
La familia de Cocay se encuentra en una disyuntiva "Yo soy hincha de talleres, mi marido es fanático de talleres, pero hoy en día tiro para Belgrano por esta dedicación de mi hijo, realmente se lo merece", sentenció Silvina.
Toda la familia ha peleado mucho para salir adelante y ha tenido que enfrentar numerosas situaciones económicas, sin embargo "la decisión fue siempre apoyarlo, y acompañarlo, siempre con humildad se llega a todos lados".
Este jueves Belgrano venció 1-0 a Spezia y espera rival en la próxima instancia.