Agustina Tolosa es una mujer trabajadora de la tierra de 70 años oriunda de la ciudad de Salsipuedes. Durante los últimos 18 años, vivió y trabajó en los terrenos que le cedió el ex Intendente Facundo Torres con su mandato en vigencia. Sin embargo, los presuntos herederos de esas parcelas las reclamaron y el juez del caso le envió a la mujer una orden de desalojo para el próximo martes 6 de julio.

Diversas organizaciones sociales, políticas y feministas brindaron su apoyo y convocan a manifestarse en el hogar de Tolosa para la fecha de desalojo.

En el año 2003 el en ese entonces Intendente de Salsipuedes, ofreció a la vecina de la localidad estos terrenos para que ella mudara su vivienda y espacio de trabajo allí: “ ‘Para no tener problemas con tus animales, vas a tener que ir a un campo y dejar esta casita’. Yo tenía que vender mi casa para poder hacer posesión del lugar donde estoy” relata la propia Agustina, explicando cómo fue su traslado desde su primera vivienda en el Barrio Villa Sol a la actual en Barrio El Talita, gracias a la gestión del funcionario de turno. Allí vive de la cría de animales, en el hogar que construyó con sus propias manos y con los servicios que logró gestionar.

Agustina ha pagado todos los impuestos desde que vive en la casa de El Talita y se ha encargado de realizar las averiguaciones pertinentes en los diferentes organismos de su jurisdicción. “No hay herederos que sean dueños de este campo”, aseguró.

Según la protagonista aclara, Juvenal Cardozo también quería esas tierras cuando se las ofrecieron a ella, pero le fueron otorgadas otras a cambio. Al parecer las escrituras correspondientes a estas propiedades fueron archivadas juntas como posesión del mismo terreno. “Después que murió Cardozo pedí que desarchivaran la posesión, la desarchivaron, pero resulta que en 2014 salió un hijo suyo que tenía escrituras… ¿De dónde sacó las escrituras? No sé”, expresa Agustina con enfado.

Los trámites legales siguieron avanzando y citaron a Agustina desde la justicia. La situación se agravó debido a que la mujer no asistió a las auditorias por demoras en las notificaciones. A causa de su ausencia, el juez la consideró en Rebeldía y ordenó su desalojo.

Un motivo extra por el que tanto Agustina como sus vecinos están preocupados y preocupadas, es que en ese mismo espacio también tienen su casa su hija y su nieto, quienes se trasladaron al terreno con conocimiento del gobierno después de ser damnificados por las inundaciones del año 2015. La orden también alcanzaría a esta familia. “Yo quiero saber qué tengo que hacer, (...) ahora estoy tranquila, pero por ahí me agarran los nervios y ni duermo” se sincera Agustina, con la honestidad como bandera y la impotencia que la habita.

Frente a la inminente orden, Tolosa, sus hijas, vecinos y vecinas junto a la agrupación La Ollera de Salsipuedes están organizando un evento de resistencia para el día del desalojo, además de estar asesorándose legalmente y juntando firmas de la comunidad. 

Desde Nexo FM, hablamos con Samanta, integrante de La Ollera, quien nos acercó detalles del conflicto e invitó a “poner el cuerpo” para ayudar a “contener ese desalojo”. Escuchá sus palabras aquí.